El grupo de migrantes en la ciudad fronteriza de Reynosa, México, sigue creciendo. Mientras que miles de haitianos siguen atravesando México rumbo a Estados Unidos, efectivos de seguridad continúan implementando medidas para frenar el flujo migratorio.
Algo que ha desalentado a algunos como Edmon Michel, migrante haitiano en Reynosa que dijo a la Voz de América que “como está la situación ahora mismo, no sabemos si estaremos mejor acá o allá”
Michel se refirió a los sucesos recientes donde miles de haitianos que acampaban bajo un puente entre la localidad Del Río, en Texas, y México fueron dispersados el fin de semana y una buena parte de ellos deportados a su país.
Según funcionarios del Departamento de Seguridad Nacional, que fueron citados por la agencia de noticias AP sin revelar sus nombres, hasta el jueves cerca de 4.000 migrantes permanecían debajo del mismo puente. Luego de que el número alcanzara un máximo de 15.000 el fin de semana.
Aproximadamente 1.400 de esos migrantes han sido enviados de forma expedita a Haití en 13 vuelos bajo la ley de salud pública conocida como Título 42.
Es ante dichas medidas, que muchos haitianos comienzan a ver a México como una opción atractiva para quedarse, ya que la travesía se les ha tornado difícil.
Michel afirmó que tuvo que caminar muchos kilómetros en Tamaulipas con un grupo de alrededor de cuatrocientos haitianos porque, según dijo, autoridades federales los bajaron de los autobuses en que viajaban rumbo a la frontera norte con México.
“Choferes de taxi, por ejemplo, nos quitan dos mil pesos, mil quinientos pesos, de ahí a una esquina y nos dicen ahí está la Inmigración no puedo seguir y nos dejan botados y se van con su plata”, narró a la VOA.
Haitianos han sido engañados
La historia de Michel y el aumento sin precedentes de haitianos a través de México, no es ajena a las autoridades locales, tal y como reconoció Marcelo Ebrard, secretario de Relaciones Exteriores de México.
Ebrard afirma que muchos, si no la mayoría de estos migrantes haitianos, habían estado viviendo en América del Sur durante años antes de emprender el viaje a la frontera de Estados Unidos, con la esperanza de obtener asilo.
“Provienen de Brasil y de Chile, no de Haití; tienen condición de refugiados en esos países”, observó.
El secretario mexicano consideró que la travesía por México se debe a la confusión generada por un anuncio del 3 de agosto, cuando Estados Unidos amplió los términos de tiempo para el Estatus de Protección Temporal a varios países incluyendo Haití.
Sin embargo, la medida “tiene que ver con personas de origen haitiano que viven en Estados Unidos que están haciendo trámites migratorios”, además agregó que requiere una conversación regional porque los están engañando.
Ellos son los que tienen que tomar conciencia de todas estas cosas, a ver si nos dan otra oportunidad”
“Los dirigentes de estos conglomerados, de refugiados en Brasil y Chile, les dijeron hay que irnos a Estados Unidos rápido para que a ustedes les den también el beneficio de esta disposición”, citó.
Mientras tanto hay setecientos haitianos en Reynosa, que ahora están considerando quedarse en México en lugar de arriesgarse a cruzar la frontera con la posibilidad de ser deportados a su país, tal y como explicó Michel. “Sacrificamos muchas cosas, hasta nuestros niños para llegar hasta acá; entonces ellos son los que tienen que tomar conciencia de todas estas cosas, a ver si nos dan otra oportunidad”.
Deportaciones
Unicef afirmó que dos tercios de los haitianos de regreso a Haití, en 12 vuelos, fueron mujeres y niños.
«Cuando los niños y las familias son enviados de regreso sin la protección adecuada, se encuentran aún más vulnerables a la violencia, la pobreza y el desplazamiento, factores que los llevaron a migrar en primer lugar», denunció el organismo.
Se esperaba que seis vuelos más aterrizaran el jueves en Puerto Príncipe y Cabo Haitiano, según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
La crisis se ha acumulado desde que unos 15.000 migrantes, la mayor parte de ellos haitianos, llegaron a Del Rio, Texas desde Ciudad Acuña, México en las últimas semanas.
Las imágenes de los migrantes, muchos de ellos familias, reunidos bajo un puente de la carretera y yendo y viniendo a México en busca de comida, han sorprendido a Estados Unidos y provocado una nueva crisis sobre la política migratoria.
Muchos migrantes haitianos todavía se encuentran en Ciudad Acuña, donde también corren el riesgo de ser deportados.
El miércoles se conoció que el gobernador de Texas Greg Abbott envió una flota de vehículos policiales a la frontera con México para frenar el flujo de migrantes con “un muro de acero” como lo llamó.
Abbott dijo que la medida buscaba evitar que miles de migrantes cruzaran a EE. UU. por ese punto, “estas son medidas sin precedentes”, dijo el gobernador.
* Nota original Víctor Hugo Castillo, adaptación web Lenny Castro.
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