El Gobierno de Estados Unidos anunció el lunes que suspenderá durante un año la imposición de un total de 232 aranceles sobre el acero ucraniano, en un nuevo intento por potenciar la maltrecha economía de este país, gravemente afectada por la guerra emprendida por Rusia el pasado mes de febrero.
«No podemos limitarnos a admirar la fortaleza y el espíritu del pueblo ucraniano, debemos cubrirles las espaldas y apoyar una de las industrias más importantes para el bienestar de la economía de Ucrania», señaló la secretaria de Comercio de EEUU, Gina Raimondo, al anunciar la medida. «Para que la producción de aluminio pueda seguir sirviendo de salvavidas para el pueblo de Ucrania, deben poder exportarlo».
Estados Unidos es el principal importador de acero del mundo, pero Ucrania no se encontraba entre sus 10 principales vendedores a fecha del 2019, según datos del gobierno.
El Gobierno estadounidense destacó que la industria metalúrgica emplea a uno de cada 13 trabajadores en Ucrania, si bien es cierto que el conflicto ha dañado gravemente muchas de las plantas siderúrgicas del país, incluida la mayor de todas, la de Azovstal, que se ha convertido en la última línea de defensa de los ucranianos en la ciudad de Mariúpol.
A pesar de la devastación sufrida por la industria del país, algunas plantas han seguido operando, además de -en ocasiones- alimentando y dando refugio a sus trabajadores. Algunas de las instalaciones han llegado a reabrir incluso cuando aún el combate continuaba en las proximidades.
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