Chesterfield, MO • En un esfuerzo por inspirar a las nuevas generaciones y abrirles caminos hacia profesiones emocionantes en la industria aeronáutica, el innovador Programa de Cadetes Red Tail (RTCP) está utilizando la aviación como una poderosa herramienta de transformación. Esta iniciativa visionaria busca empoderar a jóvenes en situaciones de riesgo, brindándoles acceso a educación aeronáutica y oportunidades profesionales que de otro modo podrían estar fuera de su alcance.
El RTCP es mucho más que un programa de capacitación en vuelo. Es una experiencia inmersiva de seis semanas que sumerge a los participantes en un mundo de desafíos y descubrimientos. Desde instrucción en aulas hasta prácticas en simuladores y vuelos reales, los cadetes desarrollan habilidades técnicas y personales invaluables.
Pero el programa no se limita a lo aeronáutico. También ofrece seminarios de educación financiera, entrenamiento en liderazgo y desarrollo de habilidades para la vida. El objetivo es forjar no solo futuros profesionales de la aviación, sino también ciudadanos comprometidos y líderes comunitarios.
«Estamos intentando hacer una diferencia con algunos de estos jóvenes hoy día,» comenta uno de los mentores del programa y dueño de la escuela de Aviación Elite Aviation John Tipton. «Esto no es algo que puede ser entregado, hay que trabajarlo» añadió el ejecutivo.
Los cadetes son seleccionados cuidadosamente por su excelencia académica, participación comunitaria y pasión por el campo aeronáutico. Durante el intenso programa, no solo adquieren conocimientos técnicos, sino que también cultivan cualidades invaluables como disciplina, trabajo en equipo y perseverancia.
El pasado 16 de Mayo, seis nuevos cadetes fueron introducidos al programa en una ceremonia en la escuela de vuelo Elite Aviation en Chesterfield; el lugar donde los jóvenes recibirán su instrucción. La escuela de aviación, junto a la iglesia Crossroads en Chesterfield son algunos de los principales organizadores, pero el programa cuenta con apoyo corporativo como la empresa Boeing.
«Estoy emocionada de conocer a un montón de gente nueva y tener todas estas nuevas oportunidades» dijo Sasha Parrot-Santillan a Diario Digital. La joven dijo que buscará una trayectoria hacia ser Astronauta y que estos primeros pasos eran muy emocionantes. Preguntando sobre que busca aprender Parrot-Santillan de esta experiencia ella respondió — «Aprendiendo un rol de liderazgo y convertirme en una persona más responsable,».
Dereck Beal es uno de los Cadetes que entró en la segunda clase de este programa. A día de hoy es capitán de su clase y acaba de recibir su permiso de vuelo con instrumentación, dandole el paso a continuar progresando a ser piloto de aviones multimotor.
«Me involucre en el programa de aviación por una recomendación de mi maestra de negocios,» dijo Beal a Diario Digital STL. «Mucha gente a puesto mucha confianza en mi y he recibido mucho apoyo de mi madre y otros que me han ayudado a llegar donde estoy ahora,» afirmó el cadete.
Beal describe el programa como transformativo en el que ha aprendido, no solo ha volar, sino también a manejar sus finanzas y asumir responsabilidad como adulto, un proceso de maduración que le ha permitido permanecer enfocado en su objetivo de convertirse en piloto de aviación comercial.
Con el apoyo de mentores, ex aviadores y socios empresariales, el RTCP está sembrando las semillas para la próxima generación de pilotos, ingenieros aeronáuticos y profesionales de la aviación. Pero más allá de eso, está inspirando a estos jóvenes a convertirse en modelos a seguir, embajadores de la diversidad y agentes de cambio positivo en sus comunidades.
A medida que los graduados del RTCP despegan hacia nuevas aventuras, están llevando consigo un poderoso mensaje: el cielo ya no es el límite para aquellos que se atrevan a perseguir sus sueños.
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